Graeme Dell y Miguel Rodrigo desgranan a Argentina y Portugal
Hablan de las virtudes de las dos selecciones y las claves de la final
Dan algunos nombres que podrían ser decisivos
Argentina y Portugal se jugarán este domingo la Copa Mundial de Futsal de la FIFA. El combinado sudamericano buscará revalidar el título logrado hace cinco años en Colombia ante un rival que quiere ser el cuarto ganador de la historia en la que es su primera final y a la que llega como actual campeón de Europa.
Ambas han mostrado un gran juego de equipo y han tenido en el banquillo a dos entrenadores capaces de cambiar las dinámicas de los partidos y dar con las teclas adecuadas que les han valido para estar en la gran final en el Kaunas Arena.
En la búsqueda de analizar cómo llegan ambas selecciones a esta final y la que ha sido su evolución técnica y táctica durante el torneo, FIFA.com habla con los dos miembros del Grupo de Estudio Técnico de la FIFA en Lituania, Graeme Dell y Miguel Rodrigo.
Una Argentina trabajada
Preguntados por las cualidades a destacar sobre la actuación de Argentina en la fase final, Graeme habla desde el punto de vista técnico: "Un gran trabajo en la presión alta la ha diferenciado de sus rivales. Tienen un estilo de juego y un enfoque estratégico cohesionado. Todos sus jugadores han mostrado un gran nivel técnico y sin el balón en los pies son tenaces y capaces de frustrar a su rival, como pasó con Brasil en semifinales".
"Sin el balón, Argentina intenta robar rápido con una presión solidaria y lo busca llegando a doblar y triplicar el marcaje", destaca, mientras que a nivel táctico añade: "Se siente cómoda en escenarios de 1 contra 1 y cuando busca el juego directo y fluido. La versatilidad de Borruto ofrece un ritmo de trabajo excepcional, beneficiándose de la facilidad en el pase de los Vaporaki, Cuzzolino o Brandi, quienes colectivamente sustentan el estilo de juego ofensivo".
Por su parte, Miguel también destaca las habilidades técnicas y tácticas como equipo de Argentina: "A nivel defensivo representa el sacrificio individual en la defensa 1 contra 1, en el repliegue, en la presión al balón y la mejor organización posible con cualquier posición en el campo. Están preparados mentalmente para defender en las tres líneas sin sufrir. En ataque ha preferido jugar muy directo y de forma efectiva, con gran resultado dado su altísimo nivel técnico".
Una Portugal con variantes
Sobre Portugal, el otro aspirante al título, Graeme habla a nivel táctico de un equipo por encima de individualidades: "La clave es su fluidez en el juego, son flexibles y, lo más importante, saben cómo jugar cuando le presionan. Se adaptan a diferentes sistemas, siendo un buen ejemplo de selección capaz de realizar una transición fluida entre sistemas como el 1-3, 3-1, 2-2 y 4-0, a menudo dentro de la misma fase del juego".
Añade: "Tienen un talento excepcional, buscan la presión alta para incomodar al rival y suele comenzar muy bien los periodos. Han demostrado una gran capacidad de recuperación física y mental tras los duros partidos con España y Kazajstán. La autoestima y confianza en el juego de Jorge Braz es evidente. Indica la solidez de su liderazgo y el respeto que se requiere de un entrenador para que un equipo tenga éxito".
Miguel, por el contrario, alaba a Portugal y destaca lo positivo de haber estado varias veces en el alambre: "Es todo orden, organización y juegan con la tranquilidad de estar vivos tras dos prórrogas y una tanda de penaltis, por lo que ya saben cómo convivir con el riesgo. Mentalmente es una ventaja al estar habituados a estas situaciones. En ataque es un equipo con un claro sello 4-0 pero la aparición de Zicky y Erik le ofrece expandir el campo al permitirles jugar un sistema 3-1 con el pívot".
Sobre los balones parados, Graeme lo tiene claro: “Para Portugal han sido fundamentales. Las han ejecutado con éxito y se ha visto variedad, mientras que Argentina también ha sabido llevarlas a cabo. Ambas tienen jugadas innovadoras y bien ensayadas y saben defender las del rival". Miguel añade: "Son dos equipos de ‘pizarras inteligentes’ que buscarán utilizar el balón parado para marcar".
Nombres propios
En lo referente a nombres a destacar, es obligado mirar a los banquillos con dos figuras diferentes: un experto como Jorge Braz y un recién llegado como Matías Lucuix. "Será clave que ambos tienen muy claro sus estilos de juego. Son entrenadores ganadores a pesar de su diferencia de edad. Va a ser una buena oportunidad para todos los entrenadores del mundo de aprender cómo dirigir un grupo humano a nivel táctico y emocional", nos cuenta Miguel.
Graeme añade: "Matías Lucuix ha demostrado una intención de ganar con su plan de juego trabajado y estructurado, mientras que la fluidez en el juego es el sello de Jorge Braz. De la final me interesa ver cómo se desarrolla el duelo técnico y táctico y cómo van cambiando sus estrategias conforme avance el partido".
Entre los nombres propios, para Miguel hay que destacar a "dos de los pívots con más impacto en el Mundial, un consagrado Brandi y un joven Zicky". Continúa: "Será una de las claves: el juego interior, y cómo André Coelho y Maxi Rescia, de los mejores defensores del mundo, los neutralicen. Además, la amenaza y el desequilibrio en el uno contra uno viene de Borruto y Pany". Graeme añade: "Para mí el jugador más influyente es Alan Brandi. Alto, fuerte, listo y fundamental en la estructura de juego con balón y en repliegue. Tiene una gran ética de trabajo".
También miran a la portería, con un Nico Sarmiento que ya fue elegido Mejor Portero del Mundial 2016 y un Bebé que brilló en la semifinal ante Kazajstán: "Sarmiento ha estado muy constante en todo el torneo y Bebé ha ido casi igualándole. Han sido fundamentales para que sus respectivos equipos lleguen a la final", comentan los dos.
Como no, la figura de Ricardinho también sale a escena: "Su papel ha cambiado, ahora es más creador. De él emana la mayor parte del juego de Portugal, es el que más pase y asistencias da y es clave para su equipo", comenta Graeme, a lo que Miguel añade en ese sentido: "Con él en la pista, Portugal es más peligrosa. Es el que da más asistencias y numero de pases y su rendimiento al alto nivel en su último partido en un Mundial podría ser desequilibrante".