La formación de entrenadores es un componente esencial para mejorar el nivel del fútbol por todo el mundo y, en ese sentido, Senegal albergó hace poco la edición más reciente del Programa de Desarrollo de Formadores(as) de Entrenadores(as) de la FIFA. 

El curso tuvo lugar durante cuatro días en Saly, antiguo establecimiento comercial portugués ubicado en la costa meridional de Dakar, organizado conjuntamente con la Federación Senegalesa de Fútbol. Constaba de varios módulos con sesiones teóricas, prácticas y reflexivas, y estaba destinado principalmente a entrenadores de fútbol base poseedores de una licencia C. 

"Estos cursos, sin duda, van a proporcionar una nueva forma de acceder a los conocimientos. Asimismo, nos permitirán estar más cualificados y ser más competentes en nuestra labor en el campo, pero sobre todo también en cuanto a formar a entrenadores, especialmente a nivel de licencia C", declaró el senegalés Mama Sow, entrenador, instructor y ex Director Técnico Nacional.

La FIFA ya había hecho fructificar previamente una exitosa colaboración similar con la Federación Estadounidense de Fútbol (USSF) en Kansas y con la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) en su centro de entrenamiento en Teresópolis. Dichos cursos están en línea con la Visión 2020-2023 de la FIFA, que pretende aumentar la competitividad global elevando el nivel por todo el mundo, y está previsto celebrar otros de ese tipo en Arabia Saudí y Australia.

Mohamed Magassouba, que fue el seleccionador de Malí en las Copas Africanas de Naciones 2019 y 2022, hizo hincapié en la importancia de la formación de entrenadores. 

"Hoy en día, el fútbol no es una ciencia exacta, pero en la práctica utilizamos la ciencia para jugar al fútbol", afirmó Magassouba, quien también ha trabajado en la República Democrática del Congo. "Para utilizar esta ciencia, necesitas una formación sólida, que solamente te pueden proporcionar los formadores de entrenadores. Estos tienen que dar a los estudiantes todos los ingredientes necesarios para alcanzar el éxito desde un punto de vista técnico, físico, psicológico, táctico y estratégico. Así es como se puede enseñar y desarrollar a los entrenadores de fútbol". 

Para Magassouba, el curso servirá para infundir confianza: "Además, [el curso] supondrá un estímulo que inspirará a la gente (no solo a los directivos de fútbol, sino al ecosistema deportivo en general), otorgando un mayor reconocimiento y confianza a los entrenadores locales. Por otra parte, necesitan más apoyo para poder destacar frente a aquellos a quienes se dan todos los medios para progresar. Creo que si se concediesen los mismos recursos a los técnicos locales, serían capaces de guiar a sus equipos hacia la victoria". 

"Actualmente, eso está empezando a dar frutos en África, como se pueden imaginar", añadió. "Eso significa que estas cosas son tangibles en lo que respecta a los números. Y eso es importantísimo". 

Doudou Sarr, director técnico de la región de Louga, en el noroeste de Senegal, resaltó la importancia de estar al día de las últimas tendencias en el fútbol. 

"Nuestra manera de valorar y de entrenar está cambiando. El mundo está en constante evolución, y lo mismo puede decirse del fútbol", señaló. "El fútbol de ayer no es el fútbol de hoy, y sabemos que el fútbol de hoy no será el fútbol del mañana. Para no perder el ritmo a estas dinámicas, los entrenadores también tenemos que actualizarnos y aprender nuevos métodos". 

"Este tipo de programa de formación es perfecto para ayudarnos a permanecer en armonía con esta nueva realidad pedagógica y andragógica. Como formadores, tendremos un impacto mayor en los entrenadores, y también en los jugadores", añadió Sarr.

Al tiempo que reiteraba la importancia de la formación de entrenadores, coincidió en que los buenos resultados podrían acabar llegando también a nivel internacional. 

"Un formador de entrenadores de calidad producirá entrenadores de calidad, y los entrenadores de calidad producirán jugadores de calidad. A largo plazo, eso mejorará el fútbol a escala local para ayudar a Senegal a competir con otras selecciones africanas y, tal vez, internacionales", afirmó.

El mes pasado, la FIFA presentó un proyecto para modernizar las instalaciones deportivas del Instituto Lamine Gueye, del que también se beneficiará la comunidad circundante, y Sarr lo consideró igualmente como algo esencial para mejorar el nivel del fútbol. 

"Para nosotros en general y para mí en particular, la mejora del fútbol se sustenta en tres pilares: formación, información y desarrollo. Por desarrollo, entiendo el desarrollo de las instalaciones. Los entrenadores y jugadores deben ser formados como es debido, pero los formadores de entrenadores también deben ser formados de manera apropiada", explicó.

"Una vez que esas personas son formadas ‘en condiciones’, los campos de fútbol se convierten en sus laboratorios, en los lugares donde pueden aplicar sus ideas. Dichos campos forman parte de las infraestructuras de las que estoy hablando". 

"El fútbol no puede desarrollarse solamente mediante los conocimientos teóricos. Necesitamos que estas instalaciones sigan basándose en lo que es realmente el fútbol; y la verdadera esencia del fútbol sólo puede encontrarse en el campo, y en ningún otro sitio", concluyó.