La FIFA ha organizado la segunda jornada de investigación destinada a abordar los resultados de los programas de observación llevados a cabo en verano y las conclusiones de los proyectos piloto, así como a visitar las instalaciones de investigación y desarrollo (I+D) de césped de la Universidad Estatal de Michigan (MSU) y a reunirse con los equipos que trabajan para lograr que los terrenos de juego de los estadios e instalaciones de entrenamiento de la Copa Mundial de la FIFA 26™ sean de gran calidad.

Más de 40 expertos en terrenos de juego, productores de césped y empresas líderes del sector se reunieron en la MSU, colaboradora de la FIFA en materia de investigación junto con la Universidad de Tennessee (UT), para debatir sobre recomendaciones y últimas tendencias a fin de contar con las mejores superficies de juego posibles en la Copa Mundial de la FIFA 26™, que será la más grande de la historia. 

“Estoy encantado con los avances realizados por el equipo en materia de investigación y su aplicación práctica”, declaró Alan David Ferguson, responsable sénior de Gestión de Terrenos de Juego de la FIFA.

“En 2026 se disputará el mayor Mundial de la historia, lo que implica que nuestra labor también será enorme. Tenemos la suerte de contar con algunos de los mayores expertos del sector trabajando en Estados Unidos o a distancia”. 

El Equipo de Gestión de Terrenos de Juego de la FIFA llevó a cabo observaciones del césped durante los partidos de la Copa América de la CONMEBOL en 2024. El equipo evaluó las instalaciones en diferentes estadios que se emplearán en 2026, comprobó cómo trabajan los equipos de mantenimiento de campos y realizó otras pruebas cuando terminó el torneo a fin de analizar el progreso de los terrenos de juego a lo largo del campeonato.

Asimismo, varios grupos colaboradores presentaron los resultados de proyectos piloto que se han llevado a cabo en el Estadio de Dallas. El equipo de gestión de terrenos de juego de dicha sede instaló un campo de césped natural durante la Copa América de la CONMEBOL 2024, que se cuidó y mantuvo en buen estado de acuerdo con las directrices de las Copas Mundiales de la FIFA durante los tres partidos allí disputados.

También se diseñó un campo de “instalación rápida” para el partido que enfrentó a Canadá y México el 10 de septiembre. Tanto los jugadores, como los cuerpos técnicos y el personal de operaciones del estadio hicieron comentarios positivos sobre ambas iniciativas. 

Cuando se confirmaron las ciudades anfitrionas y estadios de la Copa Mundial de la FIFA 2026™ en junio de 2022, el equipo de gestión de campos de fútbol de la FIFA emprendió un innovador proyecto de investigación y desarrollo de cinco años a fin de crear los mejores terrenos de juego posibles para dicho torneo.

La FIFA comenzó su colaboración con la UT y la MSU, dos centros de renombre especializados en la gestión de campos y el bienestar de jugadores, para llevar a cabo el mayor programa de investigación de campos del mundo en el ámbito del fútbol. En la UT se ha construido una instalación vanguardista para recrear las condiciones de un estadio cubierto. La MSU, por su parte, dispone de un protector de asfalto de más de 2100 m² en el campus que imita el proceso de colocar césped artificial en el suelo de los estadios.

La Copa Mundial de la FIFA 26™, que se celebrará en tres países anfitriones, 16 sedes, y una gran variedad de estadios, husos horarios y condiciones meteorológicas, plantea desafíos únicos para garantizar que los terrenos de juego sean homogéneos y coherentes. Asimismo, es una oportunidad para ofrecer condiciones de juego óptimas en el mayor certamen deportivo de la historia, así como en futuras competiciones.