No se hace historia todos los días, ni tampoco se convierte ese hito en algo ordinario en 72 horas. Pero eso es precisamente lo que hicieron Gibraltar, y en especial Joseph Chipolina, el mes pasado.

El 13 de octubre, Gibraltar logró su primera victoria competitiva en categoría absoluta, el 0-1 fuera de casa ante una selección de Armenia capitaneada por la figura del Arsenal Henrikh Mkhitaryan. El primer gol internacional de Chipolina supuso tres puntos en la Liga de las Naciones de la UEFA.

Tres días después, bajo el emblemático Peñón de Gibraltar, el estadio Victoria vibró con el segundo triunfo de los locales a nivel absoluto, esta vez frente a Liechtenstein. El autor del tanto de la victoria fue de nuevo Chipolina, con su segunda diana internacional.

Las dos victorias consecutivas propiciaron el ascenso del combinado en la edición de octubre de la Clasificación Mundial FIFA/Coca-Cola hasta su posición más alta hasta la fecha, la 190ª. ¿Cuál fue el secreto de su éxito en esos dos triunfos históricos?

En el primero, Armenia realizó nada menos que 35 disparos a la puerta de Kyle Goldwin, diez de ellos entre los tres palos, y la férrea defensa gibraltareña repelió 70 ataques peligrosos. Para unos jugadores no profesionales, resulta toda una proeza volver a empezar cada 60 segundos y afrontar una nueva oleada ofensiva realizada por una delantera profesional con Mkhitaryan al frente, uno de los arquitectos del juego más eminentes del mundo del fútbol.

"Estoy muy feliz con la actuación que realicé, pero todo el equipo estuvo sencillamente extraordinario", declaró Goldwin a FIFA.com tras el partido. "Si te fijas en las estadísticas, sí, ellos hicieron muchos disparos, pero la mayoría se produjeron desde fuera del área, y fue porque mis compañeros estuvieron fenomenal".

Dada su profesionalidad y naturaleza organizada, no sorprendió que Armenia dominase la posesión del balón, con un porcentaje del 78%. Pero incluso en su segunda victoria, contra otro "pez chico", Liechtenstein, Gibraltar también tuvo menos la pelota, 44% frente al 56% del rival.

Pese a todo, los llanitos se mostraron implacables en sus oportunidades, transformando uno de sus dos disparos entre los tres palos contra Armenia y dos de sus cinco intentos frente a Liechtenstein.

"La victoria nos sabe a gloria. Es el premio a mucho trabajo. Estamos en esto juntos. Este grupo es increíble ahora mismo. Tenemos que seguir trabajando por este mismo camino".

Las palabras de Chipolina, goleador por partida doble, resumen a la perfección la actitud y ritmo de trabajo de los suyos. Están en esto juntos, en pleno proceso de aprendizaje. Pagaron cara su inexperiencia en competición durante los preliminares de la Copa Mundial de la FIFA 2018™.

Sus tres dianas de camino a Rusia significaron mucho (sirvieron para empatar con Grecia y Chipre, este último en casa y a domicilio) pero en las tres ocasiones les faltó la concentración y recibieron más goles en contra que les hicieron perder. En total, registraron la cifra record de diez derrotas en otros tantos partidos de clasificación para la cita mundial.

Contra Armenia, no solo se adelantaron en el marcador por primera vez en un encuentro de competición como miembro de la FIFA, conservaron la ventaja y ganaron. Y ante Liechtenstein, no malgastaron su empate, sino que lo aprovecharon con el histórico tanto de la victoria de Chipolina.