Un joven de 24 años estaba jugando a la videoconsola con su amigo en una habitación cuando sonó el teléfono. Le informaron de que el puesto con el que soñaba desde niño era suyo. Se puso eufórico, y su compañero le pidió que llamara a su nuevo jefe para hacerle una petición muy atrevida.

Richarlison obedeció a Neymar, telefoneó a André Jardine y le pidió llevar el 10 de la selección brasileña, el mismo que han lucido figuras como Rivaldo, Ronaldinho y el propio Neymar en ediciones anteriores del Torneo Olímpico de Fútbol Masculino. El seleccionador brasileño le concedió el deseo y el futbolista está destacando en Tokio 2020 con el mítico dorsal.

El máximo artillero de la competición dialogó con FIFA.com de los mensajes de apoyo de Neymar, del récord de Romário que tiene a tiro, de la gesta de Ronaldo en la Copa Mundial de la FIFA Corea/Japón 2002™ en Yokohama, de los cuartos de final contra Egipto, de lo que significaría ganar el oro olímpico y de hacerse su primer tatuaje.

¿Cómo surgió la idea de llevar la camiseta con el 10 de Brasil, un número sagrado?

Sinceramente, yo iba a pedir el 7. Es el dorsal que llevo en el Everton y en la selección absoluta. Pero, cuando recibí la llamada de Jardine, estaba jugando a la videoconsola con Neymar en la habitación. Al colgar, enseguida me dijo: ‘Quiero ver si eres capaz de soportar la carga de ser el 10’. Todos sabemos que el 10 conlleva una responsabilidad extra. El que lo lleva está obligado a ser un jugador que decide partidos. Neymar es mi ídolo, nuestro ídolo, así que le tuve que hacer caso.

Le pedí a Jardine ser el 10 y aceptó. Neymar estaba encantado. Además, no me lo pidió porque sí. Me conoce bien, sabe que llevo ya un tiempo jugando en Europa, que puedo cargar con el peso de la responsabilidad sobre mis hombros. Creo que tomé la decisión correcta. Es un honor inmenso llevar el 10 de Neymar, Pelé, Ronaldinho, Zico y otras leyendas. ¿Ha hablado con Neymar durante la competición?

Sí, todo el tiempo. Siempre está enviándome mensajes para darme suerte, me escribe después de los partidos. Me ha contado muchas veces la euforia de ganar el oro olímpico en Río, y desea con todas sus fuerzas que Brasil vuelva a colgarse el oro en Tokio. Me llevo muy bien con él, soy uno de sus mejores amigos en la Seleção. Está viendo todos nuestros partidos y espero que podamos hacerle sentir orgulloso.

Romário es el máximo realizador brasileño en unos Juegos Olímpicos, y usted está a dos tantos de la marca de 1988. ¿Qué significaría superarlo?

Para mí, lo más importante es ganar el oro con mis compañeros, independientemente de si termino o no siendo el máximo goleador. Pero, obviamente, Romário es una leyenda del fútbol mundial y un ídolo en Brasil, por lo que conseguir esa gesta me haría el doble de feliz. Sería un hito muy importante para mí, para mi familia y mis compañeros.

En poco más de dos meses ha disputado cuatro competiciones en tres continentes

[Ríe] ¡Todo me gusta! Desde luego, adoro el fútbol y la camiseta de la Seleção. Renuncié a mis vacaciones y a la oportunidad de pasar tiempo con mi familia por venir a los Juegos. Ya hace más de dos años que no estoy con ellos tranquilamente. Fui a verlos nada más terminar la Copa América, pero no fueron ni dos días. Y encima no pude ver a mi madre, porque tenía COVID. La vi como a 30 metros de distancia y nos comunicábamos haciéndonos señas. Pero llevar esta camiseta, participar en los Juegos Olímpicos, marcar goles aquí y hacer sentir orgullosa a mi familia lo compensa todo.

¿No siente cansancio?

¡En absoluto! Tengo 24 años. Lógicamente, ha sido una temporada agotadora, pero no me siento cansado. Me dedico a lo que millones de personas sueñan con hacer [para ganarse la vida]. Me siento afortunado, pero no cansado. Ya descansaré cuando me retire. En el último partido, Jardine me preguntó si quería salir de la cancha y le dije que no. A continuación, metí dos goles. Me basta con guardar reposo los dos días que hay entre partido y partido. La final será en Yokohama. ¿Qué le parece lo que hizo Ronaldo allí en 2002?

Ronaldo hizo historia en Yokohama. Cuando llegué al estadio, vi las fotos de O Fenômeno contra Alemania. Sentí algo especial, una gran alegría de ver que Brasil se proclamó campeón allí y que nuestro ídolo marcara esos goles. Ronaldo lució aquel corte de pelo tan famoso en la final de Corea/Japón 2002. Si Brasil llega a la instancia decisiva en Tokio 2020, ¿veremos a Richarlison con otro peinado?

[Ríe] Matheus Cunha es nuestro peluquero particular, ¡tendrían que preguntarle a él! No soy de los que piensa demasiado en qué hacer con su pelo. Suelo dejarme llevar por mis amigos. Ya veremos qué pasa si llegamos a la final.

¿Qué opina de Egipto?

Egipto es una gran selección. Brasil jugó contra ellos en un partido de preparación para estos Juegos Olímpicos y perdimos 2-1. Han conseguido superar un grupo muy difícil. Creo que será un duelo complicado. Tendremos que estar plenamente concentrados para poder meter goles y ganar.

Por último, ¿qué significaría para usted ganar el oro olímpico?

Todo. Nunca me he planteado hacerme un tatuaje, pero, si Brasil gana la medalla oro, me haré uno seguro. Habrá que conmemorar el momento. Hacer historia significaría mucho.