miércoles 06 octubre 2021, 06:57

Martin Boyle, en pos de más glorias con los pujantes Socceroos

  • Habla de su trayectoria, desde futbolista a tiempo parcial a internacional

  • Eliminatorias: Australia tiene dos citas cruciales, con Omán y Japón

  • Los Socceroos llevan una racha de 10 victorias consecutivas

El armario de la pequeña Amelia Boyle, de tres años de edad, es neutral. En él cuelgan dos diminutos uniformes, el amarillo canario de Australia y el azul oscuro de Escocia, ambos con su nombre a la espalda.

Su padre, Martin, es delantero de Australia y del Hibernian. Su madre, Rachael, es mediocampista de Escocia y del Hibernian. Los dos están embarcados en sendos viajes que esperan culminar respectivamente en la Copa Mundial de la FIFA 2022™ y en la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™. Amelia, por su parte, aún no se ha decantado por ninguno de los dos.

"Le digo a Rachael que va a ser una pequeña Matilda", explicó Boyle. "Ella, por supuesto, tira para Escocia. Amelia es la niñita de mamá, así que siempre pide la camiseta de Escocia. ¡Pero pueden estar seguros de que estoy trabajando en ello!".

Martin Boyle in action for Australia

Un conflicto que el propio Boyle no ha experimentado. Su inusual periplo para llegar hasta donde está hoy le llevó de ser conductor de reparto y futbolista a tiempo parcial con el Montrose de adolescente, a ser la punta de lanza de Australia en su campaña para participar en la que sería su quinta Copa Mundial de la FIFA consecutiva. Los Socceroos encadenan 10 victorias seguidas, lo que les ha llevado a pulverizar un récord de los preliminares de la Copa Mundial y a colocarse en cabeza del Grupo B. Con dos triunfos en otros tantos partidos y ocho aún por disputar, sus dos próximos compromisos, contra Omán en Doha el jueves y contra Japón en Saitama el martes, podrían ser decisivos de cara a sus aspiraciones de clasificación.

Fue casi una casualidad que Boyle llegara a lucir los colores de Australia. 

"Hace tres años, Mark Milligan y Jamie MacLaren estaban en el Hibernian y Graham Arnold vino a nuestras instalaciones de entrenamiento para verlos", declaró nuestro protagonista, de 28 años de edad. "Todo comenzó como una broma cuando los dos le dijeron que mi padre, Graeme, era australiano. Luego me preguntó si quería ir a una concentración en Dubái para ver cómo me iba".

"Hubo conversaciones con Escocia cuando Alex McLeish era seleccionador, pero para cuando habló conmigo, ya me había comprometido a ir a la concentración de Dubái con Australia y no quise faltar a mi palabra. Nunca me he arrepentido".

Boyle hizo sombra al mismísimo Tim Cahill en su debut con Australia, con dos goles y una asistencia en la victoria por 3-0 contra Líbano. Aquel partido era la 108ª y última internacionalidad de Cahill. El exmediocampista del Everton regaló al recién llegado una camiseta firmada delante de todo el equipo a modo de bienvenida al grupo.

Una excelente acogida que el delantero ha sentido en todo momento, pese a que nunca había pisado el país natal de su padre antes de su convocatoria. 

"Antes de jugar con ellos, nunca había estado en Australia", afirmó Boyle. "Fue un poco raro al principio porque creo que muchos de los chicos no me habían visto jugar, así que lo viví como una especie de prueba. Pero el seleccionador confió en mí y fue genial tener ese impacto en mi debut".

"Todo el mundo me hizo sentir bienvenido. Tuve que echar un poco el freno al hablar porque no estoy seguro de que entendieran ni una palabra de lo que decía, pero me acogieron muy bien y creo que eso se refleja en mi rendimiento. Me siento totalmente como en casa".

"Estoy contento con los goles [4] que he marcado para Australia, aunque lo cierto es que creo que deberían haber sido algunos más. Significa mucho para mí ir allí, ponerme la camiseta y dar lo mejor de mí mismo cuando me llaman. Ya sea marcando goles o creando ocasiones, da lo mismo, lo importante es que el equipo gane".

Aussie celebration

La oportunidad de participar con Australia en la Copa Mundial es un perspectiva emocionante para el delantero, cuyos recuerdos del torneo están protagonizados por algunas FIFA Legends.

"Para mí es increíble estar ahora sentado aquí, hablando de la Copa Mundial", apuntó. "Es una situación en la que nunca imaginé que estaría. Es el punto álgido de la carrera de cualquiera. Si me lo hubiesen dicho hace apenas un par de años, seguramente me habría echado a reír". "Sería un gran honor y algo asombroso, no solo para mí, también para toda mi familia. Hemos empezado muy bien, pero nos queda mucho camino por delante".

"Creo que mi primer recuerdo de la Copa Mundial es de 2002. Me encantaban Ronaldo y Ronaldinho y me encantaba esa selección de Brasil. Yo estaba entonces en la escuela primaria y es el primer torneo que recuerdo haber visto de verdad, esperando ansioso todos los partidos, coleccionando los cromos y siguiendo a los diferentes grupos. Estar en el punto de mi carrera en el que es una aspiración realista es algo alucinante".