miércoles 14 diciembre 2016, 20:18

La celebración predestinada de Suzuki

El Kashima Antlers se ha convertido en el primer club de Japón, y de hecho de toda Asia, que disputará una final de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA, tras imponerse al Atlético Nacional, campeón de Sudamérica, por 3-0. El delantero Yuma Suzuki, canterano del Kashima, sentenció con el tercer gol la victoria de los suyos a falta de cinco minutos para el pitido final y sólo un minuto después de haber saltado al terreno de juego del Estadio Suita City de Osaka.

La exultante reacción de Suzuki recuerda la particular forma de celebrar los goles que tiene Cristiano Ronaldo, el astro del Real Madrid, al que el Kashima podría enfrentarse en la final de Japón 2016.

Durante esta entrevista concedida en exclusiva a FIFA.com tras el partido, la gran promesa del fútbol japonés irradia todavía un entusiasmo irrefrenable por la victoria de los suyos y por la posibilidad de verse las caras con unos de sus ídolos en el encuentro decisivo del Mundial de Clubes.

“Siento una emoción indescriptible por haber visto puerta nada más tocar la pelota por primera vez”, ha declarado Suzuki sobre su remate de un centro medido de Mu Kanazaki, en un alarde de sangre fría. “Kanazaki y yo nos entendemos a la perfección sobre el terreno de juego, y hoy me ha pasado un balón fantástico”.

Tras marcar su gol, Suzuki dio un salto con giro incluido, aterrizó con los brazos separados apuntando al suelo y lanzó un poderoso rugido. Esta celebración “a lo Ronaldo” se debió en parte a la admiración que siente por el portugués y en parte a las sugerencias que llevaba un tiempo recibiendo.

“Mucha gente me había pedido que lo hiciera. Incluso los periodistas japoneses me decían: ‘Imitarás a Ronaldo si marcas, ¿verdad?’. De manera que sólo he cumplido sus deseos. ¡Tenía que hacerlo!”, comenta Suzuki medio en broma, a la vez que agarra nuestra grabadora para recalcar sus palabras.

¿Obra del destino? Suzuki vio jugar a Ronaldo por primera vez hace ocho años, cuando el astro portugués militaba en las filas del Manchester United que ganó la Copa Mundial de Clubes en 2008. Aunque Suzuki sólo contaba 12 años, recuerda al detalle la victoria apasionante del Manchester United por 5-3 sobre el Gamba Osaka en la semifinal disputada en Yokohama.

El destino ha querido que el Estadio Internacional de Yokohama albergue este año la gran final de la competición, donde el Kashima se medirá con el ganador de la semifinal de este jueves entre el Real Madrid y el Club América.

“Fui a ver aquella semifinal. No sé todavía a quién tendremos delante en la final, pero sería maravilloso que nos enfrentáramos a Ronaldo, al que vi jugar en ese mismo estadio en 2008”, asegura Suzuki.

El Kashima está sacando el máximo partido a su primera participación en el Mundial de Clubes. Puede que el campeón de la J.League esperara disfrutar de la ventaja del factor campo contra el coloso colombiano este miércoles, pero una ensordecedora banda de aficionados del Atlético Nacional llenó hasta los topes el estadio y creó un ambiente electrizante.

“A veces parecía que estuviéramos jugando en casa del rival”, explica Suzuki.

Pese a todo, Suzuki rebosa confianza y asegura estar disfrutando al máximo del torneo. Parece que los pequeños tropiezos no le afecten, y ha demostrado tener nervios de acero en los momentos decisivos. Jugar en los escenarios mundiales le ha servido para acelerar su crecimiento como futbolista. Impertérrito ante la presión que supone disputar una final, Suzuki tiene en mente un único resultado.

“El Kashima es un club que exige victorias, y eso no cambiará aunque nos enfrentemos al Real Madrid. Nuestro próximo partido es la final, y siento una emoción y una ilusión inmensas. El cansancio no será un factor a tener en cuenta. Lo único en lo que pensamos ahora es en ganar el partido”.