La posibilidad de contar en el fútbol con árbitros asistentes de vídeo (AAV) sigue perfilándose. El IFAB y la FIFA han vuelto a colaborar estrechamente con las partes interesadas de las ligas y las federaciones en un tercer taller celebrado en Zúrich los días 27 y 28 de octubre.
Hasta ahora se habían llevado a cabo talleres en los Países Bajos y Estados Unidos, y pruebas en vivo en los partidos de la Major League Soccer estadounidense, así como en un amistoso entre Italia y Francia en septiembre de 2016. Todo ello ha proporcionado una serie de temas formativos e informativos que, en el taller de Zúrich, se han transmitido a los representantes de Alemania, Australia, Bélgica, Brasil, Estados Unidos, Francia, Italia, México, Países Bajos, Portugal y Qatar.
El Director Técnico del IFAB, David Elleray, lideró el componente de formación de árbitros de las sesiones del taller, y el Director de Innovación Tecnológica en el Fútbol de la FIFA, Johannes Holzmüller, se centró en los aspectos de la aplicación y la configuración de esta tecnología. Ahora se espera que los participantes “sigan trabajando juntos y avanzando en la dirección correcta”, como declaró Elleray en la sede de la FIFA.
“Interferencia mínima para máximos beneficios” Ahora que se posee experiencia directa en los aspectos de arbitraje y de revisión de vídeos de este proceso, a los asistentes se les enfatizaron varios puntos nuevos. El concepto primordial era “Interferencia mínima para máximos beneficios”, focalizado en cómo tratar “los errores claros en situaciones que pueden cambiar el rumbo de un partido”.
Con la presencia y las opiniones de árbitros expertos, administradores del arbitraje y gestores del proyecto, el objetivo para el futuro consiste en, como expresó Elleray, “conservar la fluidez y las emociones del partido, a la vez que se revisan aquellos incidentes decisivos, capaces de cambiar el devenir de un encuentro”. En este sentido se sugirieron varios cambios operativos y organizativos, incluida la introducción de un asistente de AAV (AAAV) para ayudar al AAV en la monitorización y la comunicación; cambios en la forma de llevar a cabo la comunicación entre la cabina de vídeo y el terreno de juego; y el procedimiento para los casos en los que el árbitro deba revisar directamente una secuencia (es decir, una OFR, o revisión sobre el terreno de juego).
En la sesión de la tarde, los participantes observaron algunos partidos preparados, en los que pudieron seguir muy de cerca a los árbitros o sentarse junto al revisor de las repeticiones en vídeo y conocer la velocidad a la que se deberían producir las interacciones entre el árbitro y el revisor. Pero antes, el grupo vio una serie de ilustraciones de incidentes, en los que la colaboración de un AAV habría sido de gran utilidad. Si bien hizo hincapié en que más del 95% de las decisiones no deberían pasar por el AAV, Elleray afirmó que, en los goles, los lanzamientos de penal, las tarjetas rojas directas y los casos de confusión de identidad, la revisión desde la cabina podría ayudar más directamente a reducir los incidentes de error más graves.
Transparencia tecnológica Elleray enfatizó además que a los árbitros les espera un largo periodo de aprendizaje hasta sentirse realmente cómodos con este proceso, y todos los representantes trabajan por acordar un protocolo sistemático que determine qué se puede revisar y qué no, y los mejores procedimientos para ello. También se hizo hincapié en la importancia de mantener el poder de decisión en manos del árbitro, de que los árbitros permanezcan libres de distracciones innecesarias y de que su autoridad no se vea nunca cuestionada.
Entre los temas de debate figuraron también qué decisiones pueden someterse a la intervención del AAV y a la revisión sobre el terreno de juego, junto con el significado de “error claro”, que se definió como “casi todas las personas neutrales coinciden en que la decisión es incorrecta”. De igual manera, despertó un gran interés la charla sobre las mejores medidas para la fluidez del trabajo y de las comunicaciones mediante la tecnología disponible, que se basa en sistemas creados por las empresas Hawk-Eye y ChyronHego (actualmente configurados para demostraciones en el Centro de Entrenamiento AAV en la sede de la FIFA).
“Hemos analizado con los gestores del proyecto la configuración tecnológica de los sistemas de AAV, para garantizar que se proporcionen los mejores ángulos de cámara lo más rápidamente posible a los AAV y al árbitro sobre el terreno de juego”, explicó Holzmüller, de la FIFA. “Para ello, dos proveedores de tecnología presentaron sus dispositivos para la revisión sobre el terreno de juego por parte del árbitro, y la ubicación de este proceso de revisión se debatió con las diferentes partes interesadas. Además, entre los participantes en este seminario se intercambiaron las primeras ideas sobre cómo informar a los espectadores en el estadio y a los televidentes de que se está llevando a cabo un proceso de revisión".
El IFAB es la organización independiente responsable del mantenimiento y actualización de las reglas del fútbol. En marzo de 2016, el organismo, compuesto por representantes de las federaciones de fútbol de Inglaterra, Irlanda del Norte, Escocia y Gales, y por la FIFA, en consultas con la comunidad futbolística en general, decidió investigar la viabilidad del AAV, con la posibilidad de aprobar el proceso de introducción de dicha tecnología en 2018 o 2019.