"El fútbol para mí lo significa todo, ha marcado mi vida. Jugar al fútbol me ha hecho ver el mundo con otros ojos. Intento aprovechar todas las oportunidades de estar en el campo para servir de inspiración a la gente y ayudar a las nuevas generaciones".
En una época marcada por los conflictos y las crisis, el mundo está dividido. Pero a través del poder del fútbol, la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ logrará que la gente se dé la mano para unirse, descubrir nuevas culturas, formar parte de una comunidad global y compartir una celebración.
La emblemática campaña de la FIFA Football Unites the World es un movimiento global que pretende servir de estímulo, unir e impulsar el desarrollo a través del fútbol, en el que las FIFA Legends nos contarán lo que representa para ellas el poder unificador del deporte rey.
Ya prácticamente a las puertas de la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia & Nueva Zelanda 2023™, la nigeriana Asisat Oshoala reflexiona sobre sus recuerdos y su visión de la capacidad del fútbol para unir al mundo.
Cuando la mítica Perpetua Nkwocha marcó su último gol como internacional, en octubre de 2014, el sexto de la victoria por 6-0 sobre Zambia en el Campeonato Africano Femenino de la CAF, los seguidores de las Súper Halconas se preguntaron cuánto tiempo tendrían que esperar para volver a ver a una jugadora de semejante calidad. Y aunque en aquel momento no se hubiesen dado cuenta, la respuesta había pasado ante sus ojos unos minutos antes, en el quinto tanto, obra de una jovencísima Asisat Oshoala…
Y lo corroboró el bagaje con el que terminó el torneo: cuatro goles, el título de campeona continental y el premio a la mejor jugadora de la prueba. Unos meses antes, ya se había proclamado máxima goleadora, mejor jugadora y subcampeona de la Copa Mundial Femenina Sub-20 de la FIFA Canadá 2014, dejando entrever lo que le deparaba el futuro y confirmando algo de lo que ella misma estaba convencida desde hacía tiempo: que el fútbol iba a ser su vida.
“El fútbol para mí lo significa todo, porque me descubrió de verdad, me ha hecho ver la vida con otros ojos, ha marcado mi vida”, asevera la delantera, de 28 años, que debutó en la primera división nigeriana a los 15 años con el club en cuya cantera se formó, el Robo. "Gracias a él he podido ver las diferencias culturales, conocer gente, descubrir su cultura y aprender cómo viven. También me ha hecho ver de una manera diferente a mi propia comunidad, porque cuando era más joven nunca había pensado en algunas de las cosas que hago hoy", añade la futbolista, que ha jugado en Nigeria, Inglaterra, la RP China y España, donde milita en el FC Barcelona desde 2019.
Oshoala, actualmente una de las mejores jugadoras del planeta, es consciente del papel que desempeña como modelo para las jóvenes apasionadas por el fútbol. "Jugar al fútbol me ha hecho ver el mundo de otra manera. Intento aprovechar todas las oportunidades de estar en el campo para servir de inspiración a la gente y ayudar a las nuevas generaciones. Soy un símbolo de esperanza para muchas chicas, por el lugar de donde vengo y también por mi religión o mi familia, por muchas cosas", explica.
El trayecto recorrido por esta quíntuple Jugadora Africana del Año (2014, 2016, 2017, 2019 y 2022) desde las canchas de su ciudad natal, Ikorogu, hasta los estadios de la Copa Mundial Femenina de la FIFA™ le ha brindado muchas ocasiones de comprobar el poder que tiene el fútbol para unir a la gente.
"El fútbol une a personas diferentes de todo el mundo y consigue de golpe que pasen a quererse. Gracias a él, la gente vibra", afirma la triple campeona de la liga española y bicampeona de la Liga de Campeones Femenina de la UEFA.
"Si esto pasa, ya podemos imaginarnos qué lecciones puede extraer la gente para aplicarlas a sus propias vidas”, afirma. “Ni siquiera hace falta conocer a las personas para ser amable con ellas. No hace falta conocerlas para animarlas o darles algo. Yo creo que el fútbol une al mundo de una manera diferente y tiene el poder de traer la paz al mundo", concluye.