No hay dolor para Ajibade

“Hay que soportar sin dejar de avanzar, así es como se gana”. Esta conocida frase cinematográfica es probablemente aplicable a la mayoría de las películas de la oscarizada saga Rocky.

Tras el partido entre Nigeria e Inglaterra, que se saldó con un 0-0, FIFA.com hablaba con Rasheedat Ajibade, la capitana del conjunto africano, y sus palabras recordaron un poco a las del mítico boxeador de ficción. “Lejos de ser un castigo, el entrenamiento te hace más fuerte y resistente, y nos ayudará a ganar el próximo partido”, aseguraba la nigeriana.

En la rueda de prensa celebrada instantes antes, esta atacante diestra, que atesora una gran habilidad y técnica, se mostró orgullosa de recibir el premio Jugadora Live Your Goals del Partido, pero no pudo ocultar su decepción por el resultado. Sin embargo, cuanto más hablábamos con ella, más evidente resultaba que su espíritu de lucha no tardaría en revivir.

Después de dos jornadas, Nigeria ocupa el último puesto del disputadísimo Grupo C. En los partidos frente a Brasil e Inglaterra, a las Flamingoes les faltó pegada a la hora de golpear al rival. “De cara al próximo partido deberemos trabajar sobre todo en mejorar nuestro porcentaje de acierto para aprovechar las ocasiones de las que disponemos. Hasta ahora no hemos logrado marcar en ninguno de los dos partidos que hemos jugado, y eso tiene que cambiar”, explica la '10' de Nigeria, señalando el principal problema que su equipo ha acusado hasta ahora.

Por tanto, las africanas llegan casi noqueadas a la última jornada de la primera fase, en la que, para añadir más dificultad al reto, se enfrentarán a la RDP de Corea, actual líder del grupo. Pero ya se sabe que los boxeadores que están a punto de besar la lona son siempre los más peligrosos. “No importa el nombre de nuestro próximo rival. Lo único importante es que sabemos que necesitamos la victoria. Estoy convencida de que lograremos nuestro objetivo si hacemos exactamente lo que nos pide el entrenador”, asegura.

Arengando a las compañeras Está claro que, si en dos partidos sólo sumas un punto y además te quedas sin marcar, la confianza acaba por resentirse un poco, pero Ajibade, que fue la máxima goleadora de Nigeria en la fase de clasificación y es pieza clave para su equipo, se resiste a bajar los brazos. “En una situación así puede ocurrir que las jugadoras que carecen de experiencia duden de sus posibilidades, así que yo intento hacer valer mi veteranía para apoyarlas e infundirles coraje. Les digo una y otra vez: '¡Podéis hacerlo! ¡Salgamos a por todas y ganemos!’”, explica.

Y es que Ajibade, que actualmente tiene 16 primaveras, ya participó hace dos años en la Copa Mundial Femenina Sub-17 de la FIFA que se disputó en Costa Rica. En aquella ocasión, la selección nigeriana alcanzó los cuartos de final, así que, lejos de arrojar la toalla, nuestra protagonista se muestra combativa y ambiciosa. “Esta vez me he marcado el objetivo de llegar más lejos que en Costa Rica. Creo que la experiencia que adquirí entonces me ayudará a conseguirlo. Confío ciegamente en nuestras posibilidades y sé que estamos capacitadas para lograrlo”, advierte.

Con tal de lograr su objetivo, la delantera del FC Robo nigeriano está dispuesta incluso a ir más allá del umbral del dolor. “Me encanta entrenar y ponerme a prueba. Soy muy competitiva. Cuando en un ejercicio nos mandan hacer 15 repeticiones… ¡yo hago cien!”, revela. “Hoy en día, una futbolista tiene que tratar de mejorar cada día y no cejar nunca en ese empeño. Es algo imprescindible si quieres llegar a ser profesional”, añade.

Pese a su talento y tenacidad extraordinarios, Ajibade admite que hay días en los que ese ferviente deseo de entrenar la abandona. “Cuando me despierto y no me apetece entrenar, pienso en el mayor de mis objetivos, el que he acordado con Dios. Eso me motiva para seguir trabajando y no rendirme nunca”, explica.

El 8 de octubre, a las 16:00 (hora local) en Ammán, llegará la hora de la verdad para Nigeria, que deberá doblegar a RDP de Corea y lograr los tres puntos si quiere estar en la siguiente ronda.