El sorteo preliminar de la UEFA para Catar 2022 será el 7 de diciembre de 2020
Recordamos 10 choques legendarios de la fase previa europea
En esta 1ª parte, una leyenda escocesa, un payaso polaco y un milagro búlgaro
⚔️ Suecia-Estonia, 1933: El primero de una larga serie
El éxito de la primera Copa Mundial de la FIFA™, celebrada en Uruguay en 1930, llevó a la FIFA a organizar un torneo clasificatorio para Italia 1934. Así, 32 selecciones procedentes de tres continentes participaron en la primera competición preliminar. Suecia y Estonia disputaron el primer encuentro de clasificación para la cita mundialista.
11 de junio de 1933, Estadio de Estocolmo - Suecia 6-2 Estonia
Goles: Knut Kroon (7'), Lennart Bunke (10'), Bertil Ericsson (13'), Torsten Bunke (43’), Bertil Eriksson (70'), Sven Andersson (79’ PEN) para Suecia; Leonhard Kaas (47'), Richard Kuremaa (61') para Estonia
Para la historia quedaría que el delantero Kroon fue el autor del primer gol en un partido de clasificación de la Copa Mundial de la FIFA™. El cuadro local se situó con un 3-0 a favor al cuarto de hora de juego, y antes del descanso Torsten Bunke firmó la cuarta diana de los suyos. Leonhard Kaas y Richard Kuremaa permitieron a los visitantes dar de nuevo algo de interés al duelo, pero los 8.000 espectadores de esta contienda histórica vieron cómo su equipo amplió de nuevo distancias en el tramo final.
Suecia obtendría luego el pase a Italia 1934 con un triunfo en Lituania. Estonia no ha vuelto a estar nunca tan cerca de una participación en el Mundial.
⚔️ Inglaterra-Polonia, 1973: Un payaso abate a los Tres Leones
Para alcanzar el certamen de Alemania 1974, los ingleses estaban obligados a vencer a Polonia en casa. Sir Alf Ramsey, técnico del título de 1966, había sido objeto de críticas, pero el reto parecía perfectamente asequible. Hasta tal punto que en los comentarios previos al partido el entrenador del Nottingham Forest, Brian Clough, comparó al guardameta polaco con “un payaso con guantes”, por su camiseta amarilla, sus pantalones rojos y sus calcetines blancos. Sin embargo, los payasos no siempre hacen reír…
17 de octubre de 1973, Wembley, Londres, Inglaterra 1-1 Polonia
Goles: Allan Clarke (63' PEN) para Inglaterra; Jan Domarski (55') para Polonia
Inglaterra puso cerco al arco polaco desde el saque inicial, pero Jan Tomaszewski se multiplicó bajo palos. El marcador no se movería hasta el minuto 55, cuando el extremo Grzegorz Lato, por la izquierda, asistió a Jan Domarski, que llegaba por la derecha y no tuvo más que empujar el balón lejos del alcance de Peter Shilton. Menos de diez minutos más tarde, los ingleses restablecieron la igualdad en el casillero a través de un penal transformado por Clarke. A partir de entonces reanudaron su ofensiva incesante, aunque de un modo infructuoso: 35 disparos de Inglaterra, dos de Polonia y el “payaso” fue quien rió el último.
“Recuerdo lo último que nos dijo Kazimierz Gorski antes del partido: ‘Podéis jugar durante veinte años y disputar más de mil partidos con la selección sin que nadie se acuerde de vosotros. Pero esta noche tenéis la ocasión de entrar en la historia’. Tenía razón. Seguro que no hice el mejor partido de mi carrera aquel día, pero tuve mucha suerte”, comentaría Tomaszewski, cuya actuación obligó a Inglaterra a esperar otros siete años antes de regresar al Mundial.
⚔️ Gales-Escocia, 1985: euforia y tragedia para el Tartan Army
Rumbo a México 1986, Escocia cosechó un éxito histórico que debió haber hecho felices a todos sus hinchas. Pero tras ese encuentro comenzó un periodo de duelo nacional. El deporte que tanto había dado al legendario Jock Stein se lo arrebataría todo esa noche de septiembre en Cardiff…
10 de septiembre de 1985, Ninian Park, Cardiff, Gales 1-1 Escocia
Goles: Mark Hughes (13') para Gales; Davie Cooper (81' PEN) para Escocia
En 1985, Escocia sumaba tres clasificaciones consecutivas para el Mundial, pero llegaba a Cardiff rozando la eliminación. Gales se había impuesto en Glasgow con un gol obra, cómo no, de Ian Rush, y estaba a solo dos puntos de la segunda posición. Si terminaban detrás de España, los galeses tendrían asegurado disputar la repesca ante el representante de la OFC.
El asistente de Stein, Sir Alex Ferguson, recuerda haber observado la tensión en el rostro de su mentor a medida que se aproximaba la hora del saque inicial. Y peor aún, en el minuto 13 Mark Hughes abrió el marcador para Gales. A la hora de juego, el exentrenador del Celtic de Glasgow tomó una decisión atrevida al sustituir a su estrella, Gordon Strachan, por Davie Cooper. El extremo del Rangers justificaría la confianza depositada en él al anotar de penal y hacer que su equipo empatase así a nueve minutos de la conclusión.
En los últimos instantes, creyendo que el árbitro había pitado el final que implicaba la clasificación de los suyos, el seleccionador escocés se levantó para ir a saludar a su homólogo galés… y sufrió un infarto. Unos minutos más tarde se certificaba su fallecimiento en la enfermería del Ninian Park…
Aquel día habían viajado a Cardiff 12.000 escoceses. Uno de ellos resumiría así en una entrevista ante las cámaras el sentimiento de toda una nación: “Hubiéramos preferido quedar eliminados y que nos devolviesen a Jock”.
⚔️ República de Irlanda-España, 1989: desdicha de Míchel y alegría de Bonner
Tras no acudir a los 13 primeros Mundiales, República de Irlanda comenzó la competición preliminar de la 14ª edición, la de Italia 1990, sumando dos puntos en sus tres primeros compromisos. Los Boys in Green no estaban pues en una situación idónea en el momento de recibir a una España que presentaba un pleno de cinco victorias. No obstante, con Jack Charlton como seleccionador, se permitían soñar, ya que el técnico los había clasificado para su primer gran torneo internacional, la UEFA EURO 1988.
26 de abril de 1989, Lansdowne Road, Dublín, República de Irlanda 1-0 España
Gol: Míchel (16', propia meta) para la República de Irlanda.
Unos meses antes, en Sevilla, España había impartido una verdadera lección de fútbol al cuadro irlandés, con un resultado final (2-0) que no reflejó lo más mínimo el dominio de los locales. Charlton tampoco podía contar con los servicios de John Aldridge, delantero del Liverpool, aún afectado por la catástrofe de Hillsborough de unos días antes. Sin embargo, llevados en volandas por 50.000 espectadores, los irlandeses impusieron una presión infernal a su adversario. España se vendría abajo en el minuto 16, cuando Ray Houghton envió un centro destinado a Frank Stapleton. Este fue superado por Míchel, pero la tentativa de despeje del español acabaría alojándose en el fondo de su propia meta.
Los visitantes lo dieron todo en busca del empate, pero con un Pat Bonner de las grandes noches el resultado ya no se movería hasta el pitido final. “Había que hacer un partido enorme para ganarle a España, y lo hicimos. No cabe ninguna duda de que ese partido supuso un punto de inflexión en nuestra clasificación para Italia 1990. Yo incluso diría que fue una de las noches de fútbol más lindas de Lansdowne Road”, señaló el arquero irlandés tras aquella proeza.
⚔️ Francia-Bulgaria, 1993: Kostadinov priva a los Bleus del sueño americano
Francia jugaba en casa en las dos últimas jornadas y le bastaba un punto para certificar su pase a EEUU 1994. No lo logró contra Israel (2-3), pero estaba segura de conseguirlo frente a Bulgaria, un rival al que solo le valía ganar.
17 de noviembre de 1993, Parque de los Príncipes, París, Francia 1-2 Bulgaria
Goles: Éric Cantona (32') para Francia; Emil Kostadinov (37', 90') para Bulgaria
Francia era favorita y se adelantó mediante Éric Cantona, que aprovechó un pase de Jean-Pierre Papin a la media hora de juego. Todo iba viento en popa para los Bleus, América estaba a la vista… durante siete minutos. Emil Kostadinov saltó en un saque de esquina e igualó para los visitantes. Con la reciente derrota ante Israel muy presente, los franceses se mostraron menos atrevidos en ataque, más preocupados de conservar las tablas que de ir a por la victoria. El plan funcionó hasta el minuto 89, cuando David Ginola obtuvo un lanzamiento de falta.
En lugar de conservar el esférico y dejar pasar los segundos, intentó un centro al área que no encontró receptor. Los búlgaros lanzaron un contragolpe, y Lyuboslav Penev mandó un balón en largo para Kostadinov, quien, en un ángulo imposible, conectó una semivolea que se coló tras golpear en el larguero de Bernard Lama. El cronómetro indicaba 44'58''… “Los franceses tenían tanto miedo que jugaron atenazados. Sabíamos que iban a comportarse así. Nuestra táctica se basaba en ese parámetro. Jugaron a empatar, no buscaron nunca la victoria. No merecían clasificarse. Los machacamos cuando más daño les hacía”, dijo el capitán búlgaro, Hristo Stoitchkov, que unos meses más tarde sería uno de los héroes del EEUU 1994.