La clasificación de Filipinas para la Copa Mundial Femenina de la FIFA Australia & Nueva Zelanda 2023™, su primer gran cita mundialista, ha sido extraordinaria en todos los aspectos.

"El trayecto ha sido largo", explica Mariano Araneta, presidente de la Federación Filipina de Fútbol (PFF).

"Es un gran logro [la clasificación]. Refleja el sacrificio, la disciplina y el empeño de las jugadoras, el cuerpo técnico, la directiva y todas las personas que están involucradas en el fútbol femenino. Filipinas ha demostrado que no hay nada imposible".

Y lo cierto es que únicamente quienes siguen de cerca su progresión son conscientes de los enormes avances registrados por el país. El incipiente fútbol femenino de Filipinas era un pionero en la región y se jugaba en gran medida a nivel amateur, pero su selección nacional no llegaba a cuajar, ya que antes de 2018 nunca había superado la fase de grupos de la Copa Asiática Femenina de la AFC.

La PFF sabía que había que hacer borrón y cuenta nueva, y se centró en el desarrollo de la cantera, al ser esencial contar con una liga nacional femenina competitiva.

La FIFA se sumó proporcionando apoyo financiero a través del Programa Forward y la colaboración dio sus frutos en 2018, con la puesta en marcha de la nueva liga femenina de la PFF. Diez de los mejores equipos femeninos del país disputaron entre julio y noviembre un certamen de 45 partidos del que se proclamó campeona la Universidad De La Salle. Araneta reconoce el gran respaldo prestado por la FIFA al torneo.

"Agradecemos a la FIFA su apoyo a la liga femenina desde 2018", dice. "La liga ha mostrado la calidad y las habilidades que tienen las jugadoras que compiten aquí, y nos ha permitido crear la reserva de la que se nutre principalmente la selección nacional".

El entrenador Ernie Nierras considera por su parte que el sostén de la FIFA ha sido fundamental, ya que la liga nacional ha pasado de ser una competición escolar a un torneo de clubes.

"El apoyo de la FIFA es tremendo", manifiesta el técnico, exseleccionador de Filipinas. "Cuando empezamos, hace cuatro años, habría unos ocho clubes. Ahora tenemos 14 equipos compitiendo".

Con la creciente popularidad de la modalidad femenina, la PFF también ha prestado atención a potenciar otras modalidades además del fútbol once. Dado que el baloncesto sigue siendo el deporte número uno de Filipinas, la PFF ha acertado al utilizar las innumerables canchas de baloncesto y voleibol del país, y también los gimnasios, como recintos para la práctica del futsal femenino.

La FIFA prestó asimismo ayuda en este apartado a través de Vic Hermans, experto técnico de la FIFA y legendario exjugador y entrenador.

"La PFF puso en marcha en 2016 un programa en las escuelas para formar a profesores de educación física para que trabajasen desde la base, sobre todo con las niñas", recuerda Michael Kevin Goco, responsable de Futsal de la PFF. "Vic [Hermans] sostuvo que el futsal femenino debía ser un área de atención prioritaria en el país y, con su asesoramiento, la PFF activó el pasado abril la liga de futsal femenina High 5".

"La primera temporada de ensayo tiene ocho clubes de grupos comunitarios y universidades. Se está ojeando a las jugadoras y se seleccionará un grupo para la selección nacional femenina de futsal. En los próximos años pretendemos ampliar y profesionalizar la liga, poner en marcha ligas regionales de futsal y seguir mejorando la selección nacional".

El refuerzo de las estructuras de la PFF dedicadas al desarrollo hizo que los éxitos empezaran a sucederse. En su regreso a la Copa Asiática Femenina de la AFC, con motivo de la edición de Jordania 2018, las filipinas terminaron sextas. Al año siguiente se colgarían una primera medalla de bronce en el Campeonato Femenino de la AFF 2019.

Y a continuación llegó el gran punto de inflexión. El año pasado, en la Copa Asiática Femenina de la AFC 2022, que sirvió también de torneo clasificatorio continental para la Copa Mundial Femenina de la FIFA™, las filipinas, a las órdenes del australiano Alen Stajic, sorprendieron en la tanda de penales a China Taipéi, triple campeona del torneo, y alcanzaron las semifinales, lo que certificó su primera clasificación para el Mundial.

"Estoy muy ilusionada con el Mundial femenino", confiesa la guardameta filipina Inna Palacios. "No pensaba que fuese a vivirlo nunca. Es un sueño hecho realidad".

La pasión por el fútbol femenino en todo el país es ya imparable y los aficionados están deseosos de ver a su equipo causar sensación en su debut en la Copa Mundial Femenina de la FIFA™. La PFF es plenamente consciente de que esta prueba brinda una oportunidad única para que el fútbol femenino alcance ahora cotas más altas si cabe.