Cada 20 de noviembre, la comunidad global celebra el Día Mundial de la Infancia, con el fin de promover la convivencia internacional, la concienciación sobre la infancia en todo el mundo y la mejora de su bienestar.

Este día nos ofrece un punto de partida para llevar a cabo medidas inspiradoras con vistas a defender, promover y celebrar los derechos infantiles a través de diálogos y acciones que construyan un mundo mejor para los niños y niñas.

Desde su creación en 1954, el Día Mundial de la Infancia ha sido fecha de importantes hitos, como la aprobación de la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, el 20 de noviembre de 1989.

Cada año, la Fundación FIFA apoya a organizaciones no gubernamentales (ONG) de todo el planeta a través de su Programa Comunitario. En 2023, ha ayudado a 114 de ellas a poner en marcha proyectos, iniciativas y programas de divulgación, mientras que, en 2022, los proyectos con apoyo de la Fundación FIFA llegaron a más de un cuarto de millón de beneficiarios. En breve se conocerá la lista de beneficiarios de la convocatoria de 2024, para la que se ha recibido una cifra récord de solicitudes.

La campaña Be Active de la FIFA, desarrollada en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS), anima a todas las personas, pero especialmente a los niños y niñas, a hacer ejercicio de forma regular. «Be Active - Bring the Moves» traslada el mensaje de que todos los niños y niñas del planeta necesitan realizar 60 minutos de ejercicio al día, según la OMS, y recuerda que cualquier forma de actividad cuenta para alcanzar dicho objetivo. A continuación figuran algunos datos de relevancia sobre cuatro organizaciones que, con el apoyo de la Fundación FIFA, se dedican a ayudar a la infancia a través de programas que permiten a niños y niñas mantenerse activos.

Atoot es una organización benéfica que se apoya en el fútbol y la participación activa de la comunidad para empoderar a las niñas marginadas de las zonas rurales de Nepal y propiciar un cambio en sus vidas.

Su modelo basado en tres pilares —formación, fútbol y talleres sobre aptitudes para la vida— recurre al deporte para impulsar el desarrollo general de la juventud.

Como uno de esos tres pilares, el fútbol desempeña un papel fundamental en la labor que lleva a cabo la entidad. Así, Atoot organiza cinco entrenamientos semanales para niñas de entre 5 y 18 años. Las sesiones permiten a las niñas sentirse más a gusto consigo mismas y con su cuerpo, un aspecto sobre el que no suele impartirse formación en Nepal.

Para la mayoría de las niñas del interior de Nepal, entrar en contacto con otras compañeras supone toda una novedad, por lo que la experiencia las ayuda a entablar relaciones positivas, estrechas y duraderas, a adquirir dotes de liderazgo, resolución de conflictos, trabajo en equipo y gestión del tiempo, y a asumir responsabilidades por sus acciones y las de dichas compañeras.

Street Child aglutina a expertos en programas de educación, empoderamiento económico y protección que desean velar por la seguridad de la infancia en las escuelas y durante el proceso de aprendizaje, especialmente en entornos con bajos recursos y situaciones de emergencia.

La organización trabaja con niños y niñas pertenecientes a los grupos de población más marginados de más de 20 países del África subsahariana, Asia y Europa. Además de programas dirigidos a proteger a la infancia en las escuelas y durante el proceso de aprendizaje, Street Child también cuenta con un equipo de respuesta rápida para hacer frente a situaciones de crisis y recaudar fondos en caso de emergencia.

Gracias al apoyo de la Fundación FIFA, Street Child ha sido capaz de integrar el deporte y el fútbol en sus programas para mejorar los sistemas de salud mental y apoyo dirigidos a la infancia.

Alianza para la Integración Comunitaria, Utopía A.C. es una organización mexicana cuya actividad se basa en dos pilares: educación y deporte.

En lo que a la educación se refiere, la entidad trabaja en el desarrollo de las habilidades matemáticas y la comprensión lectora, mediante una metodología y programas independientes y reproducibles. En cuanto al deporte, promueve el desarrollo de la disciplina, el autocontrol, el sentido de pertenencia, la identidad y la autoestima.

En concreto, cuenta con un programa —La paz es mi utopía— que utiliza el fútbol como herramienta de transformación para empoderar a los niños y niñas que viven en condiciones de violencia y pobreza extrema. El programa también recurre al fútbol para desarrollar habilidades educativas, físicas y psicosociales que ayuden a promover una vida sin violencia.

La organización aspira a convertir a los niños y niñas en futuros líderes comunitarios.

La Asociación Alacrán 1997, ubicada en el distrito de Hortaleza, en la ciudad de Madrid (España), desarrolla proyectos deportivos, socioeducativos y de tiempo libre dirigidos a niños, niñas y adolescentes, especialmente aquellos en situación de vulnerabilidad.

Por medio de escuelas de fútbol y la atención socioeducativa, la entidad promueve el desarrollo personal y social, así como el bienestar físico y emocional.

Las escuelas de fútbol están dirigidas a niños y niñas de entre 6 y 18 años, y en ellas se hace hincapié en la importancia de valores como la mejora personal, la motivación, el compañerismo, la gestión de las emociones y la tolerancia a la frustración.

Asimismo, en los entrenamientos se trabajan la mejora de la técnica individual y conceptos básicos del juego en equipo.