Las 11 federaciones miembro de la FIFA en Oceanía se reunieron esta semana para un taller centrado en el Forward 3.0
La última versión del programa Forward de la FIFA presenta un aumento aproximado del 30% en los fondos de desarrollo del fútbol mundial
"Este taller nos motivará a profesionalizar más nuestro fútbol y a hacer realidad los sueños que tenemos para el fútbol del futuro"
La 'Sala del foco' (Limelight Room) del Aotea Centre de Auckland fue el escenario esta semana de un taller que invitó a reunirse a los presidentes, secretarios generales y directores del programa Forward de las federaciones miembro de la Confederación Oceánica de Fútbol (OFC).
El tema en el foco fue el FIFA Forward 3.0, la última versión del programa de desarrollo de la FIFA, que se extenderá hasta 2026 y que presentará una subida de cerca del 30% en los fondos invertidos en el desarrollo del fútbol. La sesión fue presentada por Hassan Khan, gerente sénior de proyectos de la División de Federaciones Miembro.
El grupo asistió en primer lugar al torneo clasificatorio para la Copa Mundial Femenina de la FIFA, donde apoyó a la selección que quedaba de Oceanía, Papúa Nueva Guinea, que sucumbió por 0-2 ante Panamá.
Durante los dos días siguientes, la atención pasó a centrarse en una combinación de presentaciones en grupo y sesiones de preguntas y respuestas, donde los representantes de las federaciones miembro pudieron hacer preguntas sobre el nuevo ciclo del Forward.
A las distintas federaciones miembro también se les brindó la oportunidad de mantener encuentros bilaterales para hablar de sus propios planes respectivos. En dichos encuentros, el equipo de Desarrollo de la FIFA estuvo representado, entre otros, por el director de la Subdivisión de Federaciones Miembro de la FIFA para Asia y Oceanía, Sanjeevan Balasingam; el director de la Oficina Regional de Desarrollo de Auckland, David Firisua, y su equipo; y el director de Programas de Desarrollo de la Subdivisión de Federaciones Miembro de la FIFA para Asia y Oceanía, Francis Molasoko.
A finales de diciembre de 2022, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, declaraba lo siguiente: "Con la puesta en marcha del programa de desarrollo FORWARD, la FIFA inauguró una nueva era en el desarrollo del fútbol mundial, cuyo tercer ciclo está a punto de empezar. Es fundamental que afiancemos nuestro compromiso con establecer unas bases más sólidas para el crecimiento del fútbol".
"El nuevo ciclo ofrecerá más inversiones, un mayor efecto gracias a la consecución de los objetivos de desarrollo del fútbol, y un control constante para garantizar el uso responsable de los fondos", añadía.
FIFA Forward 3.0
Hasta 5 millones de USD
Para que cada federación miembro cubra sus gastos operativos en relación a sus actividades futbolísticas.
Hasta 3 millones de USD
Que cada federación miembro ejecute proyectos futbolísticos específicos y bien planificados que contribuyan a la consecución de los objetivos del desarrollo del fútbol a largo plazo.
Hasta 1,2 millones de USD
Para las federaciones miembro que necesiten más ayuda, con el fin de cubrir los gastos de viaje y alojamiento de sus selecciones nacionales, así como el equipamiento futbolístico.
El presidente de la OFC, Lambert Maltock, dedicó más de 35 años de servicio al fútbol en Vanuatu, antes de asumir su actual cargo en 2018.
Al tratarse Vanuatu de un archipiélago que consta de más de 80 islas relativamente pequeñas, su propia experiencia personal le resultó muy útil para los diferentes desafíos a los que se enfrentan las federaciones miembro de la OFC, que van desde Nueva Zelanda en el sur hasta las otras diez, desperdigadas por el sur del océano Pacífico.
"El Forward de la FIFA nos inculca a todos un compromiso para desarrollar el fútbol”, declaró el presidente de la OFC al margen del taller. “Nos ayuda a fijar objetivos; a remodelar nuestra gestión y planificación estratégica. ¿Qué es lo que queremos conseguir?".
"En los dos últimos años, nuestras federaciones miembro se vieron particularmente afectadas por la pandemia de la COVID. Este taller iba sobre cómo planificamos. Para aspirar a profesionalizar más nuestro fútbol y a hacer realidad los sueños que tenemos para el fútbol del futuro", añadió.
David Firisua es el director de Desarrollo Regional de la FIFA, afincado en Auckland. ¿En qué medida apoya su labor, y la de su equipo, a las federaciones miembro?
"Nuestro principal cometido es la ejecución del programa de desarrollo Forward de la FIFA para la región, aquí en Oceanía. Es decir, consolidar todos los esfuerzos de la FIFA y garantizar a las federaciones miembro que la FIFA está ahí para ayudarlas a cumplir sus objetivos de desarrollo", explicó.
"En el último ciclo, el FIFA Forward 2.0, la mayoría de las inversiones fueron en desarrollo de infraestructuras. Por supuesto, al mismo tiempo, es especialmente importante asegurarnos de fomentar la capacitación en nuestra región y de que nuestras selecciones nacionales estén bien respaldadas; brindándoles el mejor apoyo posible para dotarlas de una ventaja competitiva cuando estén en la escena mundial", continuó Firisua.
"Hay multitud de beneficios a disposición de nuestras federaciones miembro; y sabemos que, con el FIFA Forward 3.0, estas oportunidades seguirán potenciándose para nuestra región", sentenció.
En julio y agosto, los principales nombres del fútbol femenino se darán cita en Australia y Nueva Zelanda con motivo de la Copa Mundial Femenina de la FIFA 2023™. La cita mundialista brinda una oportunidad única para poner de relieve cómo las diferentes divisiones de la FIFA trabajan juntas en beneficio de sus federaciones miembro, como quedó ilustrado con la presencia en el taller de Arijana Demirovic, directora de Desarrollo del Fútbol Femenino de la FIFA.
"Dentro de la división de fútbol femenino, ofrecemos ocho programas de desarrollo a las federaciones miembro”, explicó Demirovic. "La idea es proporcionarles un marco para desarrollar sus estrategias sobre fútbol femenino; trabajar en un itinerario de desarrollo de la base para sus niñas, así como desarrollar individualmente a mujeres en diferentes ámbitos, ya sean administrativas, dirigentes o entrenadoras".
"Es un complemento al Forward 3.0, y se fija en las áreas concretas en las que una federación miembro quiere invertir en el fútbol femenino. A partir de la estrategia, se hace mucho más fácil adaptar esos programas existentes a sus necesidades. Eso es lo que realmente queremos conseguir con los programas", subrayó.
Como país coanfitrión del campeonato, Nueva Zelanda quedó clasificada automáticamente para la Copa Mundial Femenina de la FIFA de este año, lo cual brindaba una oportunidad única para que otra selección más de la OFC pudiese clasificarse. Y la FIFA ayudó a la OFC a intentar aprovechar esa oportunidad…
"La idea era respaldar en su preparación a sus selecciones femeninas a través de un grupo de expertos para que pudiesen clasificarse para el Mundial Femenino”, continuó Demirovic. “El hecho de que el campeonato lo coorganice un país de la región se ha utilizado asimismo como una herramienta para incrementar la participación y la sensibilización, así como para hacer frente a algunos de esos retos culturales que tenemos en diferentes federaciones miembro respecto al acceso al fútbol de las mujeres y niñas".
A la postre, la aplicación de los conceptos teóricos en una realidad práctica que cambie las culturas está en manos de los dirigentes futbolísticos. Y en el caso del presidente de la OFC, Lambert Maltock, no cabe duda de sus intenciones en ese sentido.
"Creo que el impacto positivo de este Mundial será enorme. Todas las chicas y personas a las que les gusta el fútbol femenino vendrán a Australia y a Nueva Zelanda este año", resaltó.
"Puedo asegurar que estamos comprometidos a poner el desarrollo del fútbol femenino en paralelo con los programas masculinos. Es obligatorio para todas las federaciones miembro. El fútbol femenino debe tener la misma prioridad: la prioridad principal para Oceanía. No podemos traer el Mundial Femenino aquí simplemente y dejar que no tenga efecto alguno de cara al futuro", concluyó.