Cuando un equipo cuenta en sus filas con un delantero de la categoría de Didier Drogba, no hay nada imposible… y los aficionados de los diferentes clubes donde jugó pueden dar fe de ello.

A Drogba le bastó una temporada en el Olympique de Marsella para erigirse en una leyenda del conjunto francés, tras dejarse la piel para llevarlo hasta la final de la Copa de la UEFA en 2004. Con el Chelsea lo ganó todo a nivel nacional, antes de poner la guinda a lo grande con la ansiada conquista de la Liga de Campeones de la UEFA. Fue en 2012, el año en que todos los vientos soplaban en contra de los Blues [por sus flojas prestaciones en la liga inglesa]. Pero a pesar de todo, lograron imponerse al Bayern en la final de Múnich gracias a dos providenciales momentos de inspiración del marfileño.

Son sólo dos ejemplos de las múltiples hazañas que se lograron gracias al olfato de gol y el altruismo de Drogba a lo largo de su gloriosa carrera, tanto en el fútbol de clubes como con Costa de Marfil. Como punta de lanza de la famosa ‘generación dorada’ de los Elefantes, disputó tres Copas Mundiales de la FIFA y acarició el título continental en dos ocasiones, antes de ver cómo sus compañeros lo conquistaban sin él en 2015.

Por eso, cuando le preguntamos a este insaciable competidor si le habría gustado participar en una competición como el Mundial de Clubes FIFA 25™ —la primera edición de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA que opondrá a 32 equipos procedentes de las seis confederaciones—, la respuesta del FIFA Legend, evidentemente, es afirmativa.

“Creo que se trata de una excelente oportunidad de poder competir al máximo nivel para los clubes y para los jugadores”, argumenta. “Ya está la Copa Mundial, pero solamente se celebra cada cuatro años, y no todo el mundo tiene la posibilidad de disputarla”, añade el primer goleador marfileño en la historia de la Copa Mundial de la FIFA.

“El Mundial de Clubes será una cita periódica que derivará en más competiciones, más partidos y, por tanto, más oportunidades de proclamarse campeones mundiales para los jugadores”, analiza Drogba, que sabe bien lo escasas y valiosas que son las oportunidades de ganar títulos para un jugador de alto nivel. Y las ocasiones de brillar en la escena internacional son aún más infrecuentes cuando no militas en una escuadra de primer nivel mundial...

“Imagínese lo que podría sentir un futbolista que juega en Costa de Marfil, o en cualquier país de África, al proclamarse campeón mundial ante todos los grandes clubes como Chelsea, Barcelona o Real Madrid”, continúa la vieja gloria de los Blues, con los que alcanzó la cima en la Premier League y en Europa tras haber empezado en la segunda división francesa, y haber ido subiendo todos los peldaños uno a uno a base de trabajo y de entrega.

“Esta competición será muy importante para los equipos africanos, porque para ellos será una ocasión para demostrar de lo que son capaces”, subraya el ex jugador nacido en Abiyán, quien, con esta nueva fórmula que imita el formato de la Copa Mundial de la FIFA, vislumbra una oportunidad única de alcanzar la cima para los clubes procedentes del Continente Madre. Como ejemplo a seguir, Drogba menciona “la enorme hazaña” lograda por el TP Mazembe en la Copa Mundial de Clubes de la FIFA 2010, donde los Cuervos se convirtieron en el primer equipo no europeo ni sudamericano en llegar a la final de la competición.

La nueva versión de la Copa Mundial de Clubes de la FIFA con 32 equipos, que tendrá lugar en Estados Unidos en junio y julio de 2025, reunirá a clubes de las seis confederaciones en la pugna por el título de campeón mundial.