"Hay que conseguir que el fútbol de clubes vaya a más en todo el mundo". Estas fueron las palabras de Gianni Infantino, presidente de la FIFA, en un discurso dirigido a los participantes en la jornada inaugural de la tercera edición del Diploma de la FIFA en Gestión de Clubes, durante una de las sesiones presenciales del programa que tuvieron lugar en Doha (Catar).

El Diploma de la FIFA en Gestión de Clubes, de 18 meses de duración, se ha consolidado como una plataforma de prestigio que permite a destacadas figuras del fútbol de clubes de todo el mundo compartir conocimientos y establecer redes de contacto.

Pueden participar en él directivos de clubes, exfutbolistas internacionales y entrenadores que ocupen actualmente cargos directivos en un club, y su objetivo principal consiste en fomentar las mejores prácticas en la amplia variedad de actividades que deben saber ejecutarse en cualquier club de fútbol actual para triunfar dentro y fuera del terreno de juego.

"Espero que de este curso se lleven la sensación de haber aprendido algo y adquirido un bagaje importante para sus futuras carreras profesionales, porque necesitamos, en todo el mundo, líderes de primera que impulsen el fútbol de clubes —afirmó Infantino—.

No hay ninguna razón por la que el fútbol de clubes deba ser grande apenas en un par de países de Europa occidental, con un grupo reducido de diez grandes equipos. Hay que conseguir que el fútbol de clubes vaya a más en todo el mundo".

"Al hablar de fútbol de clubes, ¿qué nos viene a la cabeza? Pensamos en la Liga de Campeones, la Premier League, LaLiga, la Serie A, la Bundesliga y demás. La FIFA, en tanto que organismo rector del fútbol mundial, tiene que hacer algo también por el fútbol de clubes, porque lo cierto es que todos los futbolistas profesionales juegan en clubes".

Fortalecer y apoyar el fútbol de clubes en todo el planeta constituye un pilar importante de la estrategia general de la FIFA. Hasta la fecha, el Diploma ha logrado forjar un vínculo intenso entre la FIFA y los clubes, y el reciente sorteo del Mundial de Clubes FIFA 2025™, que será la competición mundial de clubes más inclusiva de la historia, no ha hecho sino robustecerlo.

Se han puesto en marcha nuevas iniciativas que reforzarán esta relación, en particular la implantación de una Copa Mundial Femenina de Clubes de la FIFA™, en el marco del objetivo de que haya 50 selecciones nacionales y 50 clubes en condiciones de competir por los títulos al más alto nivel.

"Nos parece importante que estas experiencias puedan intercambiarse en todo el mundo, así que tenemos que centrarnos, por un lado, en el terreno de juego, y por otro también en el ámbito administrativo —explica Infantino—. Fuera del campo tenemos todo esto [los programas] que les permite a todos ustedes y a sus compañeros compartir su experiencia y conocer las del resto".

Infantino recordó que son muy pocos los jugadores a los que se les presenta la oportunidad de ganar una Copa Mundial de la FIFA™, o siquiera de disputarla, pero el fútbol de clubes ofrece otra vía para poder llegar a lo más alto.

"Tenemos a George Weah, el primer y único africano que ha ganado el Balón de Oro, también presidente de Liberia.Nunca participó en la Copa Mundial [de la FIFA]. Nunca jugó una Copa Mundial [de la FIFA]. [LAJA(1] Nunca pudo ganar una Copa Mundial [de la FIFA]» —recalcó el Presidente de la FIFA—. Probablemente habría ganado un Mundial de Clubes [de la FIFA], o por lo menos habría tenido la oportunidad de ganarlo de haber existido entonces, con el AC Milan en aquella época, con el París Saint-Germain, con el que fuera, o con otro de los grandes clubes en los que posiblemente hubiese jugado. Tenemos que crear oportunidades para que los niños de todo el mundo sueñen con ser los mejores del mundo".

Las entidades participantes se incorporan a la red de gestión de clubes de la FIFA, que les brinda asimismo la ocasión de intercambiar experiencias para mejorar la administración de los clubes en las 211 federaciones miembro de la FIFA, al ayudarles a desarrollarse y profesionalizarse en esta esfera, lo que redundará en un mejor rendimiento dentro del campo.

"Le agradezco su visión de estar cerca de los clubes —dijo Pedro Cedillo Martínez, vicepresidente internacional del CF Pachuca, conjunto que está disputando la Copa Intercontinental de la FIFA 2024™ y que participará también el año que viene en la edición inaugural del Mundial de Clubes FIFA™ junto a otros 31 equipos—. Antes nos parecía como si fuese una declaración grandilocuente hecha desde lejos, en Suiza, y ahora nos sentimos más próximos a la FIFA".

La primera semana de la tercera edición del diploma transcurre en Catar y su conclusión coincide con el segundo aniversario de la final de la Copa Mundial de la FIFA 2022™.

"Se trata de una novedad esencial para el programa y no cabe duda de que el nivel de los ponentes y de los asistentes refleja la profesionalidad de esta sesión —apuntó Jassim bin Rashid Al Buenain, presidente de la Federación Catarí de Fútbol, que agradeció la invitación cursada a los directivos de los clubes de la Qatar Stars League (QSL)—. Estoy convencido de que va a ser muy instructiva y gratificante para ellos".

Las dos primeras promociones del programa tuvieron como alumnos, por ejemplo, a Fabio Cannavaro, capitán de la selección italiana campeona de la Copa Mundial de la FIFA™, Claudia Carrión, directora deportiva del Club América Femenil, Thiago Scuro, director ejecutivo del AS Mónaco, o Salum Abdallah Muhene, presidente del Simba SC. Y en esta edición participa otro campeón de la Copa Mundial de la FIFA™, Giorgio Chiellini, actual director de Relaciones Institucionales de Fútbol de la Juventus, así como las FIFA Legends Éric Abidal, Esteban Cambiasso y Javier Pastore.

"Apoyar a los jugadores es algo que va más allá del desempeño sobre el terreno de juego: requiere un enfoque integral que dé respuesta a las presiones singulares que acarrea el fútbol profesional —señaló por su parte Ornella Desirée Bellia, directora de la Subdivisión de Relaciones y Desarrollo del Fútbol Profesional de la FIFA—.

En la FIFA creemos en el poder benefactor del fútbol, y que sus dirigentes tienen la responsabilidad de perseguir una finalidad más noble e influir de manera positiva en la sociedad".